Gente felis

Buenos días, princesa

Donde hubo oscuridad ahora hay luz. Una luz no demasiado potente. Es una luz que alumbra allá donde voy, pero no me ciega, no me impide ver, no es demasiado brillante, es una luz normal y eso es lo más bonito de todo. Es una luz que me acoge y me da calor. Una luz que me guía, que me protege y me guarda. Y esa luz eres tú.
Nota: no sé escribir, lo siento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Me gustaría que me dejases un recuerdo de que has pasado por aquí